La certificadora con más de 60 años de trayectoria consolida alianzas estratégicas en una de las regiones más dinámicas del mercado halal mundial.

The Halal Catering Argentina HCB,  con más de seis décadas de trayectoria, afianza su posicionamiento en el Sudeste Asiático, un mercado clave y de alto potencial para la industria exportadora argentina, en el marco de su Plan Estratégico 2024–2026.

Desde 2022, THCA viene consolidando su presencia en la región, particularmente en Filipinas, donde participó de la convención de miembros del World Halal Council (WHC) y, más recientemente, en la Halal Forum Conference 2025, donde expuso sobre el valor de la certificación halal desde el Sur Global, la importancia de implementar estándares internacionales y el buen uso de la certificación halal.

Durante este año, la institución ha intensificado su agenda de visitas y conferencias en Filipinas, Malasia y Tailandia. Actualmente, se encuentra en Kuala Lumpur (Malasia) participando del Global Halal Summit, encuentro que reúne a los principales organismos certificadores bajo el paraguas de JAKIM, la autoridad halal más relevante de Malasia.

Hace pocas semanas, THCA regresó de Tailandia con un nuevo reconocimiento tras la firma de un acuerdo oficial en la ciudad de Bangkok. En paralelo, se prepara para la auditoría oficial en Indonesia, un paso estratégico que permitirá a las empresas argentinas exportar con sello halal al país con mayor población islámica del mundo.

La agenda también incluye la participación en la feria halal más grande del sudeste asiático, MIHAS, espacio estratégico para captar compradores y generar oportunidades de negocio para las empresas argentinas certificadas por THCA. Además, se prevé una visita a Singapur, país donde la institución cuenta con reconocimiento oficial y que funciona como plataforma logística clave para la reexportación hacia otros mercados globales.

El mercado halal representa hoy más de 2,5 billones de dólares anuales a nivel mundial, abarcando no solo alimentos, sino también carnes, lácteos, bebidas, cosmética, fármacos, granos, industria química, turismo y finanzas.

Con más de seis décadas de experiencia, THCA reafirma su compromiso como puente de confianza entre la producción argentina y los consumidores musulmanes de todo el mundo, garantizando estándares de calidad y ampliando el acceso de la Argentina a un mercado en constante expansión.

FERTILIZAR Asociación Civil, entidad cuyo propósito es difundir conocimiento sobre la nutrición y el cuidado del suelo para una producción sostenible, advirtió sobre la necesidad de repensar el manejo de la nutrición de cultivos en la campaña soja-maíz 2025/26. La entidad señaló que la brecha de rendimiento sigue siendo uno de los principales problemas de la agricultura argentina y que gran parte de esa diferencia no se explica por el clima, sino por una nutrición insuficiente y una baja adopción tecnológica.

 

La jornada reunió a periodistas y referentes del sector agrícola, entre ellos al presidente de ACSOJA, Rodolfo Rossi, para recorrer la operatoria portuaria y dimensionar el volumen de nutrientes que “se van” en cada barco cargado de granos hacia el exterior.

En la bienvenida, María Fernanda González Sanjuan, gerente ejecutiva de FERTILIZAR AC, expresó la relevancia de los nutrientes y destacó al fósforo como un elemento clave en la sustentabilidad del sistema productivo, refiriéndose al impacto que implica la exportación de nutrientes sin una reposición adecuada en los suelos.

El presidente de la entidad, Roberto Rotondaro, enfatizó la relevancia de articular logística, puertos y fertilización dentro de una misma mirada estratégica. “Cada embarque refleja no solo granos exportados, sino también nutrientes que el suelo pierde y que debemos reponer. Una gestión eficiente de la nutrición de cultivos y el uso de los fertilizantes es vital para que la producción de alimentos mantenga su competitividad en el mercado internacional”.

Según la Bolsa de Comercio de Rosario, el nodo Gran Rosario mantiene su puesto como segundo más importante del mundo como exportador de alimentos. Con 66 Mt embarcadas en 2024, volvió a ser el segundo enclave exportador de granos, harinas y aceites vegetales más importante del mundo, solo por detrás del Golfo de los EE.UU.

“Acercarnos al puerto es tomar real dimensión de los alimentos que producimos. Las decisiones que se toman al momento de la siembra, respecto del manejo nutricional de los cultivos impactan en la cantidad de barcos que podemos exportar y la calidad de los alimentos que allí se transportan hacia el mundo”, explicó la Ingeniera Agrónoma González Sanjuan y remarcó que, si bien Argentina sigue siendo un actor clave en la producción mundial de soja, el país enfrenta una brecha de rendimiento significativa que limita su verdadero potencial. Esta brecha se explica principalmente por una baja adopción tecnológica en cuanto a fertilizantes se refiere.

Balance de Nutrientes

El coordinador técnico de FERTILIZAR AC, Esteban Ciarlo, ofreció una detallada explicación sobre el concepto de balance de nutrientes y cómo se calcula. Presentó cifras sobre el consumo de nutrientes, evidenciando que la soja y el maíz son los cultivos que más nutrientes exportan, entre 94 y 116 kg de nutrientes por hectárea. “La soja, por su contenido nutricional, y el maíz, por su volumen de producción, son los grandes exportadores de nutrientes”, explicó.

Ciarlo informó que los seis principales cultivos del país (soja, maíz, trigo, girasol, cebada y sorgo) removieron en la campaña 2024/25 más de 3,5 millones de toneladas de nutrientes (NPKS) en un volumen de 130 millones de toneladas de granos. Mientras que el aporte de nutrientes a través de fertilización fue de solamente 1,42 millones de toneladas. “Esto significa que solo reponemos un 40% de lo que extraen las cosechas”, explicó.

Luego enumeró datos que muestran que en la campaña 2024/25:

  • La soja representa 48% de los nutrientes extraídos, seguida por el maíz (28%) y el trigo (14%)
  • En promedio, cada hectárea pierde 17 kg de nitrógeno, 5,5 kg de fósforo, 29 kg de potasio y 4,5 kg de azufre
  • El déficit total de nutrientes es de 2,1 millones de toneladas por campaña, lo que equivale a una pérdida económica estimada en 86,5 dólares por hectárea cultivada.

Con respecto al consumo de nutrientes, predominan el nitrógeno, especialmente en trigo y maíz, seguido del fósforo (P). Sin embargo, otros nutrientes se aplican en cantidades mínimas o directamente no se aplican, lo que refleja tendencias preocupantes a nivel nacional. “Los balances de nutrientes son negativos en todos los casos, poniendo en riesgo la capacidad productiva de nuestros suelos”, advirtió. Los números mostrados indican una pérdida neta promedio nacional de 56 kilogramos por hectárea de los cuatro principales nutrientes.

Para finalizar, el experto enfatizó la importancia del fósforo y su reposición en los planteos de producción agrícola. Aunque los números presentados se refirieron a la producción agrícola, también se mencionó la falta de reposición de nutrientes en ganadería.

Ciarlo apuntó que Argentina pierde cerca de 6 kg de P por hectárea cada año y no tiene reservas propias de roca fosfórica “lo que nos hace depender 100% de la importación”. Según el relevamiento de la entidad, la tasa de reposición de fósforo en la última campaña fue apenas de 57%, una de las más bajas del mundo entre países productores de granos. “Los suelos no mienten: si no reponemos lo que extraemos, hipotecamos la productividad futura además de limitar la producción actual”.

Por último, Ciarlo se refirió al Programa SUMA P que impulsa FERTILIZAR AC y destaca la importancia de incorporar fósforo a las estrategias de fertilización, ya que cada kilo de fósforo aplicado es una inversión en el suelo, una apuesta por la siembra y el futuro del activo más valioso de un productor: su suelo. “Con fósforo, hacemos que el suelo sea más productivo, rentable y sostenible. Por eso, enfatizamos la importancia de sumar fósforo para mejorar la rentabilidad y los rendimientos, haciendo la diferencia en cada cosecha”, agregó.

También recordó dónde se puede acceder a toda la información con más datos sobres las características y beneficios del fósforo para los cultivos: https://fertilizar.org.ar/suma-fosforo-hace-la-diferencia/

El desafío de acotar las brechas de rendimiento en soja

A su turno, el Ingeniero Agrónomo Guido Di Mauro, de la Universidad Nacional de Rosario, abordó la brecha de rendimientos en soja, que se refiere a la diferencia entre el potencial de producción de los cultivos y los rendimientos reales obtenidos. Presentó un análisis específico sobre las brechas de rendimiento en soja, que rondan el 30% entre lo que se produce y lo que se podría producir bajo un manejo más eficiente.

“Argentina es uno de los principales productores de soja del mundo, sin embargo, enfrentamos la necesidad de reducir esta brecha de rendimiento mediante mejoras en la nutrición del suelo y la adopción de tecnología”, afirmó.

La brecha de rendimientos de la soja en Argentina no depende exclusivamente del clima, la genética o la fecha de siembra, sino también de la gestión de la nutrición del cultivo. El desafío actual es aprovechar la sinergia entre estas prácticas para aumentar el rendimiento.

Actualmente, sólo la mitad de la superficie sembrada con soja recibe algún tipo de fertilización, y aún en esos lotes, las dosis aplicadas suelen estar por debajo de los requerimientos del cultivo. Por ejemplo, en la región núcleo los niveles de fósforo son bajos, y las dosis aplicadas de nutrientes no cubren los requerimientos, lo que limita directamente la producción.

En este contexto, Di Mauro presentó casos prácticos que demostraron cómo una adecuada fertilización puede incrementar significativamente los rendimientos actuales, tanto en soja como en otros cultivos. Además, destacó que no solo se mejora el rendimiento, sino que también podría mejorar la concentración de proteína en los granos, un factor crucial para la industria de procesamiento de soja. “La calidad y concentración de proteína son fundamentales para la industria del procesamiento de soja que genera productos de valor”, indicó.

Di Mauro recordó que la soja argentina se expandió apoyada en la fertilidad natural de los suelos, lo que permitió altos rendimientos sin fertilización durante décadas. “Esa ventaja inicial se transformó en una debilidad: hoy tenemos balances negativos de nutrientes y suelos que muestran signos de agotamiento”, advirtió.

Según sus relevamientos, apenas la mitad de la superficie sojera recibe algún tipo de fertilización y solo 20% de los productores realiza análisis de suelo. “Fertilizamos sin diagnóstico, lo que contribuye a mantener balances deficitarios y compromete la sustentabilidad- dijo, con una fertilización balanceada, incluyendo fósforo, azufre y nitrógeno en la rotación, podríamos sostener altos rendimientos y maximizar beneficios económicos a nivel sistema”, ilustró.

En sus conclusiones, Di Mauro destacó:

  • Uso insuficiente de nutrientes: en muchos lotes las dosis aplicadas están por debajo -a veces nulos- de lo que la soja requiere.
  • Oportunidades de adopción tecnológica: solo 3 de cada 10 productores alcanzan un nivel “alto” de adopción tecnológica.
  • El límite del diagnóstico: la brecha no depende únicamente de clima, genética o fecha de siembra, sino también de un bajo aporte de nutrientes y de la falta de análisis de suelo.
  • Potencial estratégico: mejorar la nutrición permitiría elevar rendimiento y calidad hasta los máximos observados en productores de punta o en ensayos experimentales.

Ambos expertos coincidieron en que la fertilización debe ser balanceada, incorporando fósforo, azufre y nitrógeno en la rotación de cultivos, para sostener altos rendimientos y maximizar los beneficios económicos, preservando la calidad del ambiente productivo.

Para más información, ingresar en www.fertilizar.org.ar

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El Ing. Agr. Néstor Franz, responsable de la Agencia de Extensión Rural de INTA en Coronel Moldes (Córdoba), analiza el potencial del cordero pesado precoz, el rol del Estado y el impacto de la genética Hampshire Down en la producción ovina nacional.

Franz recuerda una experiencia que marcó la historia del consumo de proteínas en la Argentina. “Fue cuando la industria avícola decidió hacer un plan maestro para posicionar la carne de pollo. Fue un boom que se cumplió en muchísimo menos tiempo del previsto y hoy tenemos locales exclusivos de pollo por todos lados. Creo que lo mismo puede pasar con la carne ovina”, afirma convencido.

Franz sostiene que aquellas políticas de desarrollo sectorial, tan exitosas en el pasado, hoy no existen. “No contamos con esas herramientas, y yo creo que sería fundamental volver a implementarlas. Cuando algo funcionó y fue exitoso, hay que seguir haciéndolo. La carne ovina tiene una gran posibilidad de seguir los pasos del pollo”, plantea.

El desafío de organizar la cadena

Para el técnico, el primer paso es ordenar la cadena comercial. “Tenemos productores por un lado, consumidores por otro y eslabones intermedios que en muchos casos no están articulados. Además, la cadena de la carne ovina arrastra un problema serio de informalidad. Eso dificulta el desarrollo. Si trabajamos sobre estos puntos, la actividad tiene futuro. El producto que tenemos en la región centro —Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y el norte de La Pampa— es muy bueno. Se ha incorporado genética moderna, importada por asociaciones de criadores, y contamos con carne de excelente calidad”, sostiene.

 Cordero pesado precoz: innovación para el consumo

Franz detalla la propuesta que viene impulsando junto al INTA: “Lo que planteamos es desarrollar un cordero pesado precoz para corte. Es un animal de 4 a 5 meses, de 50 a 55 kilos vivos, que rinde entre 22 y 25 kilos de carne. No hablamos del cordero clásico de 12 o 14 kilos que se cocina entero, sino de un producto pensado para el corte al plato. Eso permite que el consumidor compre la cantidad que necesite, medio kilo o un kilo, sin tener que llevarse una pieza completa. La diversidad de productos que ofrece este sistema es enorme”.

Este tipo de cordero, explica, tiene gran precocidad, bajo nivel de engrasamiento y calidad uniforme si se faena antes de la maduración sexual. “Mantiene las virtudes del cordero liviano, pero en cortes adaptados a la cocina cotidiana”, subraya.

Cómo asegurar el abastecimiento todo el año

Un desafío histórico de la producción ovina es la estacionalidad. “El ovino no entra en celo todo el año, pero se han incorporado razas desestacionalizadas. Con servicios escalonados podemos lograr partos homogéneos y abastecimiento continuo. La oveja entra en celo cada 17 días, a diferencia de la vaca que lo hace cada 21. Si armamos dos ciclos de servicio de 35 días cada uno, es posible ordenar la producción”, detalla.

La fertilidad no es un problema: “La tasa de preñez ronda entre el 93 y 94%. El punto débil es la mortalidad de los corderos en las primeras 72 horas de vida, alrededor del parto. Pero con buenas prácticas, genética carnicera y servicios cortos, los resultados son muy alentadores. Incluso hay un 20 a 25% de partos de mellizos en razas modernas. En cuatro o cinco meses esos corderos pueden alcanzar los 50 kilos”.

La clave está en extender la lactancia a 120 días y aplicar técnicas como Creep Feeding y Creep Grazing. “El cordero ingresa a un sistema de alimentación suplementaria con granos, al pie de la madre, en pasturas de alta calidad con base de alfalfa y gramíneas. Esto no se hace en zonas marginales, sino en campos agrícolas de la región centro”, señala.

Hampshire Down: genética para un mercado gourmet

En este escenario, el Hampshire Down es una de las razas más fuertes. “Es la más numerosa y de mayor calidad en la región central. La asociación ha importado genética de Inglaterra y trabaja para producir corderos pesados magros. Antes algunas líneas se engrasaban demasiado, pero hoy se apunta a animales con marmoleo interno: esa grasa infiltrada que aporta sabor, terneza y calidad. Es una gran ventaja para posicionar la carne como gourmet”, resalta.

El rol del Estado y del INTA

Franz subraya que el desarrollo no puede depender solo de los productores. “Hay que trabajar todos los componentes de la cadena, y el Estado debe actuar como articulador. El INTA es uno más, pero un actor fundamental: cumple 70 años y siempre estuvo presente. Tiene unidades ovinas en Concepción del Uruguay, Paraná, Manfredi y la tradicional Reserva 8 en Buenos Aires. Todo ese trabajo puede permitir que la carne ovina se convierta en la cuarta carne, junto a la bovina, el cerdo y el pollo”, destaca.

La diversificación, afirma, es estratégica: “Argentina presiona demasiado sobre la carne vacuna para consumo interno. Con más consumo de pollo, cerdo y ovino, se liberarían saldos exportables de carne bovina, que es la más demandada en el mundo. No hay que olvidar que la carne ovina es una carne roja, pastoril, muy similar a la bovina”.

Mercado, innovación y negocio

Franz observa un movimiento empresarial alentador. “Hoy hay empresas que desarrollan instalaciones modulares, alimentos y sanitarios específicos para ovinos, incluso sistemas como cama profunda para partos. Eso muestra que el negocio crece. El productor tiene que pensarse como productor ovino y no como tenedor de ovejas”, advierte.

También destaca la articulación con universidades, la Federación Agraria, la Sociedad Rural y las asociaciones de criadores. “Se está armando una red que involucra a todos los actores. Eso es lo que necesitamos”, dice.

Un congreso que puede marcar un antes y un después

El próximo año se realizará en Buenos Aires el Congreso Mundial de Hampshire Down, en paralelo a la Exposición Rural de Palermo. “Es importantísimo: el mundo conocerá nuestro potencial genético y los argentinos podrán valorar la calidad de nuestra carne. No se trata de un producto marginal, como a veces creemos: en Europa, el cordero de Aragón tiene denominación de origen y sobreprecios. En los mejores hoteles internacionales, la carne ovina es un plato premium”, explica.

En la última Rural, una demostración en vivo junto al chef Christian Petersen mostró el potencial del cordero argentino ante el interés  del público por ver el desposte y degustar los cortes fue enorme.

Aprender de otros países

El referente menciona casos cercanos. “Uruguay desarrolló cortes basados en la experiencia australiana y neozelandesa, y transformó la percepción del consumidor. Nosotros podríamos hacer lo mismo. La carne ovina no es solo para la parrilla: puede usarse en hamburguesas, rellenos de pastas o guisos, con cocciones rápidas o lentas. Es muy versátil”, asegura.

Córdoba y la fiesta del cordero

En Córdoba, la Cámara Ovina organiza todos los años la Fiesta del Cordero Cordobés. “Es un evento que rota en distintas localidades y este año se hará en Bell Ville junto a la Sociedad Rural. Se muestran prácticas de manejo, productos elaborados, quesos de oveja y formas de cocinar la carne. Es una forma directa de acercar el ovino a la mesa del consumidor”, explica.

La trayectoria de Néstor Franz

Franz es cordobés, pero trabajó 25 años en la estación experimental de INTA Mercedes (Corrientes), con 1.500 ovejas dedicadas a carne y lana fina. “Volví a mi provincia y hoy me toca liderar la agencia de Coronel Moldes, en el departamento Río Cuarto, una de las zonas más ganaderas de Córdoba. Aquí trabajamos con bovinos, cerdos, aves y pequeños rumiantes. Es un lugar ideal para impulsar la producción ovina”, cuenta.

Un sueño: carne ovina en la carnicería de barrio

Al final de la charla, el ingeniero resume su deseo personal: “Sueño con ir a cualquier carnicería y pedir un kilo de carne ovina. Compartir unas buenas chuletas de cordero con amigos, acompañadas por un Malbec. El maridaje es perfecto y ya empieza a ofrecerse en las bodegas de Mendoza y San Juan. Tenemos grandes vinos y tenemos la carne: ¿qué más podemos pedir?”.

Franz no deja dudas: “Argentina debe reconocer y fortalecer al INTA. Es una institución clave para producir alimentos en un mundo que enfrenta desafíos de cambio climático y creciente población. Hay un técnico del INTA en cada rincón del país, desde la quinoa hasta la mandioca, desde la frutilla hasta la batata. Debilitar al INTA sería un error: necesitamos más que nunca instituciones capaces de generar estrategias y tecnologías para asegurar alimentos de calidad. La carne ovina es parte de esa respuesta”.

En un escenario climático heterogéneo, esta campaña el campo enfrenta realidades contrapuestas y desafiantes: mientras algunas regiones padecen excesos hídricos cuya recuperación resulta prioritaria, en otras se abren nuevas oportunidades productivas. El Servicio Meteorológico Nacional proyecta un 60% de probabilidad de tener un año neutro y, tras un invierno excepcionalmente húmedo, gran parte del país presenta perfiles de suelo recargados, una condición poco habitual en la región centro y centro-oeste.

Así, nuestra mirada está puesta en acompañar a esos productores y comunidades de las regiones que están atravesando momentos difíciles por los excesos de agua, al mismo tiempo que advertimos que esta coyuntura abre en otras zonas oportunidades para encarar la siembra con mejores perspectivas.

Las proyecciones climáticas anticipan buenas precipitaciones hasta diciembre, lo que configura un escenario atípico respecto de campañas previas.

En un escenario climático heterogéneo, esta campaña el campo enfrenta realidades contrapuestas y desafiantes: mientras algunas regiones padecen excesos hídricos cuya recuperación resulta prioritaria, en otras se abren nuevas oportunidades productivas. El Servicio Meteorológico Nacional proyecta un 60% de probabilidad de tener un año neutro y, tras un invierno excepcionalmente húmedo, gran parte del país presenta perfiles de suelo recargados, una condición poco habitual en la región centro y centro-oeste.

Así, nuestra mirada está puesta en acompañar a esos productores y comunidades de las regiones que están atravesando momentos difíciles por los excesos de agua, al mismo tiempo que advertimos que esta coyuntura abre en otras zonas oportunidades para encarar la siembra con mejores perspectivas.

Las proyecciones climáticas anticipan buenas precipitaciones hasta diciembre, lo que configura un escenario atípico respecto de campañas previas.

El tipo y profundidad del suelo resultan determinantes: los suelos profundos y con mayor capacidad de almacenamiento permiten aprovechar mejor las condiciones actuales. A su vez, la presencia de napa freática también resulta determinante tanto para el potencial como las limitantes del ambiente según su profundidad.

En este contexto, la siembra temprana ofrece ventajas, como aprovechar la recarga actual y las lluvias pronosticadas para primavera, reducir la incidencia de problemas sanitarios más frecuentes en siembras tardías y evitar los costos de barbechos largos hasta diciembre.

Un aspecto para contemplar es la mayor demanda inicial de fertilización de estos maíces frente a los tardíos, lo que requiere una planificación adecuada. Sin embargo, esa inversión se equilibra con los beneficios de arrancar temprano en suelos con buena humedad y, sobre todo, con la posibilidad de evitar barbechos largos y manejo de malezas hasta diciembre.

En cuanto a los aspectos económicos, aun en un escenario de márgenes ajustados, los números muestran una señal clara: el maíz se destaca frente a la soja en prácticamente todo el país. En la Zona Núcleo, por ejemplo, el margen neto de maíz alcanza los 264,4 USD/ha, casi tres veces más que el de soja (89,3 USD/ha). En el norte de Córdoba, la brecha también es notoria: 165,6 USD/ha para maíz contra apenas 15,8 USD/ha para soja. Incluso en regiones más desafiantes como el centro de Buenos Aires, donde los márgenes se ajustan, el maíz mantiene ventajas (78,5 USD/ha vs. 72,3 USD/ha). Esa superioridad de márgenes, que se repite en la mayoría de las regiones relevadas, refleja la oportunidad que representa el cultivo en la próxima campaña, en un contexto en el que cada decisión productiva cuenta.

Dentro de los distintos planteos de fecha de siembra de maíz, las proyecciones de mercado indican una brecha de alrededor de 6 USD/tn a favor del maíz temprano (178 vs 164). A ello se suma la posibilidad de capturar mejores precios en la ventana de cosecha temprana (≈ 3% – 8%) y el potencial de mayores rindes en escenarios de buena disponibilidad hídrica.

El maíz tardío seguirá siendo la estrategia mayoritaria y fundamental para la producción argentina: su flexibilidad, la capacidad de aprovechar lluvias estivales y el manejo agronómico consolidado lo sostienen como columna vertebral del sistema.

No obstante, el ciclo 2025/26 no es una campaña más. La fuerte recarga hídrica de perfiles, inusual para esta época, abre una ventana estratégica para diversificar y ampliar la siembra temprana respecto de campañas previas. Tres razones la vuelven especialmente atractiva:

  1. Mayor estabilidad y seguridad productiva. Arrancar con perfiles cargados asegura, en promedio, techos de rendimiento 1.000 kg/ha más altos y brinda al productor una tranquilidad clave: más rinde, menos riesgo.
  2. Posibilidad de capturar mejores precios. Si bien la brecha actual de futuros abril–julio luce acotada, la historia demuestra que este diferencial es móvil. Anticiparse con maíz temprano permite estar mejor posicionado ante eventuales mejoras de precios.
  3. Más eficiencia agronómica en este contexto. El maíz temprano implica menos días de cultivo expuesto en el campo, menor presión de plagas y de enfermedades complejas de tardíos, y mayor compatibilidad con esquemas de rotación y márgenes frente a otros cultivos de gruesa.

En síntesis, el maíz tardío conserva su papel como columna vertebral de la producción, pero la campaña 2025/26 presenta una oportunidad para el maíz temprano, que emerge con una competitividad inusual, respaldado por perfiles hídricos cargados, mayor potencial de rendimiento y mejores chances de capturar precios diferenciales. Una combinación que lo vuelve, en esta campaña, una alternativa estratégica que ningún productor debería pasar por alto.

En el marco de un ciclo de charlas organizado por Productores de Limangus Argentinos (PROLIAR), y en una disertación titulada “Claves para lograr planteos económicamente viables en el nuevo escenario macroeconómico”, el Ing. Agr. Sebastián L. Riffel, especialista en nutrición de rumiantes, analizó los cambios que enfrenta la actividad ganadera y las estrategias necesarias para sostener la rentabilidad.

El nuevo escenario económico se caracteriza por una unificación del tipo de cambio, una marcada desaceleración de la inflación en los últimos meses y precios de la hacienda expresados en un dólar real, sin brecha cambiaria”, señaló Riffel, destacando que esta estabilidad obliga a un cambio de paradigma.

Antes, stockeándonos y con operaciones relativamente simples, podíamos ganar plata sin producir de forma muy eficiente. Hoy, la eficiencia productiva pasa a ser central para que los planteos sean económicamente viables”, advirtió.

En este contexto, el especialista enfatizó que la intensificación de los sistemas es la base del éxito, entendida como mayor capital y, sobre todo, más trabajo genuino por unidad de superficie. “Hace falta planificación, presencia en el campo y un manejo detallado que antes no era imprescindible”, explicó.

En la cría, la prioridad es generar más alimento y mejorar la gestión para elevar el porcentaje y peso al destete, dos puntos críticos para el sector. En recría y terminación, optimizar el uso de las pasturas resulta clave para aumentar la producción de carne por hectárea, diluir costos fijos y mejorar la rentabilidad.

Riffel concluyó que el nuevo escenario actuará como filtro para la actividad: “Hasta ahora nos salvábamos todos, pero de acá en adelante quedarán las empresas más eficientes. Las demás deberán replantearse su continuidad”.

Un nuevo informe de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) advierte que las enfermedades animales están avanzando sobre regiones donde antes no estaban presentes y que casi el 50 % representa una amenaza directa para la salud de las personas1. El cambio climático y la degradación ambiental producida por el hombre actúan como aceleradores de este fenómeno, alterando los hábitats naturales y en consecuencia aumentando la probabilidad de brotes y pandemias de origen animal3.

Este estudio complementa el publicado en 2022 en Science Advances, que concluyó que el 9 % de la superficie terrestre mundial ya se encuentra en riesgo “alto o muy alto” de brotes zoonóticos impulsados por factores climáticos. Regiones que hasta hace poco estaban libres de estas patologías se han convertido en entornos aptos para su transmisión4.

La primera consecuencia directa de esta situación es económica: más del 20 % de las pérdidas globales en producción de alimentos se deben a enfermedades provenientes del mundo animal5. En Argentina, según la Cámara Argentina de la Industria de Productos Veterinarios (Caprove), estas patologías generan pérdidas anuales equivalentes a alrededor de $60.000 millones de pesos, afectando la producción de proteínas de calidad y el acceso de la población a alimentos seguros6. “Este impacto económico convierte a la prevención en un tema clave de políticas públicas y seguridad alimentaria”, afirma Francisco Nacinovich, jefe de Infectología del Instituto Cardiovascular de Buenos Aires (ICBA), cofundador y exdirector de Investigación en Resistencia a los Antibióticos (INVERA).

La segunda tiene efectos directos en materia de salud. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 60 % de las enfermedades infecciosas humanas tienen origen animal y el 75% de las enfermedades emergentes son zoonosis, es decir, transmitidas de animales a personas5. Como indica Tomás Orduna, exjefe del Servicio de Medicina Tropical y Medicina del Viajero del Hospital F. J. Muñiz de Buenos Aires, en el país, éstas “constituyen una amenaza activa en latente expansión: la rabia persiste en murciélagos y requiere mantener la vacunación en mascotas; el riesgo de contraer leptospirosis, que se transmite a través de la orina de ratas o perros infectados, es alto en las grandes ciudades, y la leishmaniasis visceral canina ya está presente en nueve provincias y puede ser mortal para humanos”. La vigilancia, la vacunación y el cuidado ambiental son estrategias centrales para frenar su avance. También es clave promover el uso responsable de antimicrobianos en medicina humana y veterinaria, tanto para tratar infecciones diagnosticadas como para evitar su uso preventivo indiscriminado en animales sanos, ya que esto favorece el desarrollo y la diseminación de resistencia a antibióticos entre especies, lo que compromete el control efectivo de infecciones zoonóticas7.

Cambio climático como catalizador

El cambio climático y la degradación ambiental producto de la actividad del hombre están potenciando la aparición y propagación de enfermedades de origen animal. La modificación de hábitats naturales a causa de factores humanos como la deforestación y el uso excesivo de los recursos hídricos aumenta la vulnerabilidad de las especies hacia los virus y provoca el desplazamiento de especies portadoras —como murciélagos y roedores— hacia zonas habitadas por personas, aumentando el riesgo de transmisión.

La Organización Panamericana de la Salud señala que estas fuerzas se combinan con la urbanización no planificada, la invasión de zonas selváticas, el uso indiscriminado de la tierra y el agua y factores socioeconómicos que influyen en la dinámica de las enfermedades infecciosas8. Las consecuencias pueden ser graves si se tiene en cuenta que más del 52 % de las especies de mosquitos que transmiten virus humanos aumentan en número en áreas deforestadas, lo que potencia enfermedades como dengue, malaria y zika9.

De hecho, en América, mientras que entre 2014 y 2023 se registraron 3,8 millones de casos de chikungunya, solo en 2023 hubo más de 4,1 millones de infectados de dengue8 y, según un estudio internacional, para 2080 habrá 2.250 millones de personas más en riesgo de contraerlo10. Estas cifras ponen en manifiesto que la expansión de estos virus está asociada a la adaptación geográfica de los mosquitos que provoca el cambio climático.

Eventos extremos como lluvias intensas e inundaciones se han vinculado a brotes de leptospirosis y cólera en la región. A nivel global, una investigación publicada en Nature estima que el cambio climático podría provocar al menos 15.000 eventos de transmisión viral entre mamíferos de diferentes especies para 2070, lo que incrementa el riesgo de aparición de nuevas enfermedades zoonóticas11. El aumento de la temperatura marina también favorece la proliferación de bacterias como Vibrio cholerae y potencia la capacidad infecciosa de otras como Shigella y la Salmonella11.

Prevención y enfoque Una Salud

“Prevenir y controlar la transmisión de patógenos entre humanos y animales a través de estrategias como la vacunación, así como implementar políticas que ayuden a mitigar los efectos del cambio climático son, entre otras, medidas fundamentales para crear barreras epidemiológicas que protejan tanto a comunidades como a especies animales enteras”, destaca Edgardo Marcos, director del Instituto de Investigaciones en Epidemiología Veterinaria (IIEV UBA). Esta estrategia de prevención es central para reducir el uso de antibióticos y proteger tanto la salud humana como la animal.

La resistencia antimicrobiana (RAM) es otro desafío crítico que comparte terreno con la sanidad animal. Cada año, alrededor de 700.000 personas mueren en el mundo a causa de infecciones resistentes a medicamentos, y se estima que la cifra podría llegar a 10 millones de muertes anuales para 2050 si no se toman medidas. El 60 % de los patógenos resistentes provienen de animales, lo que subraya la necesidad de un uso prudente de antibióticos bajo supervisión veterinaria y médica, y de priorizar la prevención mediante vacunación y bioseguridad5.

Frente a este panorama, la OMSA, la OMS y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) promueven que los Estados elaboren sus políticas bajo el enfoque Una Salud (One Health), un modelo que integra salud humana, animal y ambiental en una sola estrategia, articulando la medicina, la veterinaria y la gestión ambiental para anticipar brotes, reducir riesgos y proteger a las comunidades12. En un contexto donde el cambio climático multiplica los factores de riesgo, Una Salud se convierte en una herramienta esencial para garantizar sistemas productivos más seguros, alimentos inocuos y una respuesta sanitaria coordinada ante futuras crisis.

En línea con esta visión, MSD llevó adelante el encuentro “Una Salud”, en el que reunió a médicos y veterinarios para debatir sobre los desafíos actuales y la importancia de implementar este enfoque integral en la prevención de enfermedades zoonóticas y la protección de la salud pública a partir de un diálogo estratégico enfocado en innovación y prevención. “Analizar la sanidad desde una perspectiva global, entendiendo que las condiciones del medio ambiente repercuten directamente tanto en las personas como en los animales -y que las acciones humanas pueden alterar esos ecosistemas y la salud de las especies que lo habitan-, nos dará herramientas para estar mejor preparados para los desafíos que vienen”, expresó Nacinovich.

Sobre MSD

En MSD, conocida como Merck & Co., Inc., Rahway, NJ, EE. UU., en los Estados Unidos y Canadá, nos unimos en torno a nuestro propósito: utilizamos el poder de la ciencia de vanguardia para salvar y mejorar vidas en todo el mundo. Durante más de 130 años, hemos brindado esperanza a la humanidad a través del desarrollo de importantes medicamentos y vacunas. Aspiramos a ser la principal empresa biofarmacéutica de investigación intensiva del mundo, y hoy estamos a la vanguardia de la investigación para ofrecer soluciones de salud innovadoras que promuevan la prevención y el tratamiento de enfermedades en personas y animales. Fomentamos una fuerza laboral global diversa e inclusiva y operamos de manera responsable todos los días para permitir un futuro seguro, sostenible y saludable para todas las personas y comunidades. Para obtener más información, visita www.msd.com y conéctate con nosotros en (X) Twitter, LinkedIn e Instagram.

 

Klein inicia la campaña 2025 con excelentes condiciones para lograr óptimos resultados, con sus nuevos híbridos de girasol, para lo cual adquirió un programa de germoplasma de amplia adaptación que garantiza una oferta de nuevos hibridos, que permiten lograr una alta rentabilidad al productor.

 

Klein G27-50 CL, híbrido simple de ciclo intermedio, con capítulo decumbente, con alta materia grasa y aceite linoleico. Es resistentes a imidazolinonas.
Recomendado para el norte y centro de la Argentina.

Klein G26-25 CL, híbrido simple de ciclo intermedio a corto, con capítulo decumbente, con alta materia grasa y aceite linoleico. Es resistentes a imidazolinonas.
Recomendado para las regiones del centro, oeste y sur de la Argentina.

Klein desarrolló una nueva generación de híbridos de girasol, pensados para responder a las demandas mas exigentes del productor moderno. Estos materiales combinan alto potencial de rendimiento con una mayor estabilidad frente a condiciones ambientales adversas, sumando tolerancia a enfermedades clave del cultivo y mejoras en el contenido aceite.  Estos híbridos ya están mostrando resultados muy alentadores en ensayos a campo, y pronto estarán en el mercado marcando un salto en productividad y rentabilidad

Asimismo, Criadero Klein cuenta con una amplia gama de variedades de trigo adaptadas a las distintas regiones de la Argentina y otros países como Uruguay, Paraguay, Brasil y Bolivia, ofreciendo soluciones que garantizan rendimiento y estabilidad campaña tras campaña. Ahora también Klein avanza con fuerza en oleaginosas “nuestros nuevos híbridos de girasol ya están disponibles para la Argentina y Bolivia, aportando innovación, potencial productivo y contenido de aceite que la región necesita para seguir marcando la diferencia, aseguraron desde la empresa”.

Acerca de Criadero Klein:

Criadero Klein es una empresa privada familiar dedicada al mejoramiento de genética de semillas más antigua del país. Con 106 años de dedicación, trayectoria, investigación y avances genéticos, está ubicado en el Partido de Alberti, Prov. de Bs. As., a 8 Km de la Ruta Nacional Nº 5.

Actualmente, el equipo de Criadero Klein continúa con orgullo y dedicación el mismo camino trazado por su fundador, el Ing. Agr. Don Enrique Klein, esforzándose en un mercado cada vez más competitivo, para satisfacer las necesidades del agricultor teniendo en cuenta también la sustentabilidad del ambiente.

La Bolsa de Comercio de Rosario conmemoró este viernes sus 141 años de vida institucional con un acto en su sede central, encabezado por su Presidente, Miguel Simioni, y que contó con la presencia del Presidente de la Nación, Javier Milei, el Gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, y el Intendente de Rosario, Pablo Javkin. La ceremonia reunió a más de 1.200 socios, empresarios e industriales, junto a una amplia representación del arco político, académico y social de la región y el país, además de universidades, representantes de la Mesa de Enlace, ONGs y entidades vinculadas al entramado agroindustrial.

En su discurso, Simioni remarcó que el lugar que recuperó y ocupa hoy la Bolsa “no es fruto de la casualidad, sino la consecuencia natural de una forma de hacer, de honrar valores como la palabra empeñada, la transparencia y la construcción de consensos, que guían nuestra acción diaria”. Destacó que “esta Bolsa es más que una institución empresaria: es un puente que une sectores distintos detrás de objetivos comunes para la comunidad, la ciudad y la región”.

Simioni subrayó la importancia de una agenda de trabajo orientada al crecimiento, capaz de generar más valor y riqueza para el país, y llamó a consolidar acuerdos entre los sectores público y privado. En ese sentido, destacó el rol de la institución en iniciativas estratégicas como la nueva concesión de la Vía Navegable Troncal y los planes de infraestructura vial para los accesos portuarios, elaborados junto al gobierno provincial y actores de la producción.

Simioni hizo un reconocimiento especial a los asociados de la Bolsa, a quienes definió como la esencia de la institución. “Son quienes le dan vida, la sienten como propia y, generación tras generación, escriben una historia que en muchos casos también es la de sus familias”, sostuvo.

El titular de la BCR agradeció especialmente la presencia de los presidentes de la Comisión de Enlace, al reconocer en ellos “a los productores que son el corazón del sistema”, y valoró la decisión del Poder Ejecutivo de avanzar en una rebaja permanente de las retenciones, “un mensaje positivo que alivia la carga sobre el campo y dinamiza la economía de nuestros pueblos y ciudades”. 

En el tramo final de su intervención, Simioni reconoció el acompañamiento de la Comisión Directiva y de todos los sectores que hacen a la vida de la Bolsa. “Nuestro compromiso es con el futuro al que los convocamos a seguir construyendo juntos, sobre la base de ideas, acciones y proyectos que consoliden la credibilidad recuperada y el rumbo claro que abrazamos como institución”, concluyó.

Al finalizar el acto, Simioni recibió un reconocimiento especial por parte de la Mesa de Enlace, que fue entregado por los presidentes de las cuatro entidades que la conforman. Andrea Sarnari, presidenta de Federación Agraria Argentina, destacó la apertura al diálogo y el compromiso institucional de la Bolsa, resaltando su rol estratégico en la construcción de consensos, el fortalecimiento de vínculos y la promoción del sector productivo y agroindustrial como motor de desarrollo para la Argentina.

Las palabras de las autoridades

El Presidente de la Nación, Javier Milei, felicitó a la Bolsa de Comercio de Rosario por su 141° aniversario y expresó su orgullo por participar del acto. Agradeció la invitación y destacó la importancia de poder disertar sobre un tema de gran actualidad y debate como la volatilidad de la tasa de interés.

A su turno, el Gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro,destacó que la identidad santafesina está forjada en el esfuerzo y la perseverancia, una provincia que históricamente supo levantarse en cada desafío y que mantiene intacta su fuerza para seguir construyendo futuro. Asimismo, recordó que en los momentos más difíciles que atravesó Rosario frente al ataque de las organizaciones criminales, la Bolsa de Comercio abrió sus puertas a las instituciones de la ciudad para sostener políticas de Estado y dejar en claro que no se daría un solo paso atrás.

En tanto, el intendente de Rosario, Pablo Javkin, expresó el agradecimiento de la ciudad a la Bolsa de Comercio de Rosario por su acompañamiento en los años más desafiantes y destacó el trabajo compartido con Miguel Simioni y con la institución frente a crisis como la pandemia, la inflación y la lucha contra las mafias. Subrayó, además, la importancia de sostener la unión entre lo público y lo privado como base para seguir poniendo de pie a Rosario.

El acto contó con la participación de altas autoridades nacionales, provinciales y locales. Además del Presidente Javier Milei, el Gobernador Maximiliano Pullaro y el Intendente Pablo Javkin, estuvieron presentes el Ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo; la Secretaria General de la Presidencia, Karina Milei; y el Secretario de Comunicación y Medios, Manuel Adorni, junto a legisladores, funcionarios y referentes institucionales.

Entre marzo de 2024 y junio de 2025, el poder de compra mostró una mejora significativa frente a productos esenciales de la canasta básica: aceite de girasol, yerba mate, leche, asado, huevo y pan.
CONINAGRO presentó una nueva edición de su informe mensual “Del Sueldo al Plato: ¿Cuánto rinde el salario?”, en el que analiza la evolución del poder adquisitivo a partir del salario promedio de los trabajadores estables, medido por el índice RIPTE (Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables), relevado por el Ministerio de Capital Humano.
Según el último reporte, los salarios registraron una mejora interanual del 57,3% entre junio de 2024 y junio de 2025, superando ampliamente la inflación interanual, que fue del 39,4%. Esta diferencia refleja una mejora real del salario del 12,8% y una recuperación acumulada del 25,8% respecto del punto más bajo registrado en marzo de 2024.
En junio de 2025, la inflación mensual fue del 1,6%, mientras que el salario promedio medido por el RIPTE (Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables) mostró un crecimiento del 2,8%, ubicándose por encima del nivel general de precios. A valores constantes de junio de 2025, el salario promedio medido por RIPTE pasó de $1.166.780 en marzo de 2024 a $1.468.135 en junio de 2025.

¿Cuánto rinde el salario?

El salario promedio medido por el RIPTE mostró una mejora sustancial en su poder de compra frente a los alimentos básicos durante el último año.

En el caso del aceite de girasol, el poder adquisitivo del salario aumentó un 41,9%, lo que permitió adquirir 99 botellas de 1,5 litros adicionales. En marzo de 2024, el salario alcanzaba para 237 botellas, mientras que en junio de 2025 se incrementó a 336 botellas.
Respecto a la yerba mate, la mejora fue aún más significativa, con un 82,3% de aumento en el poder de compra. Esto equivale a 293 paquetes de yerba adicionales, al pasar de 356 paquetes de medio kilo a 650 paquetes en el mismo período.
En el caso de la leche, el incremento fue del 60%, lo que se traduce en 349 sachet de un litro adicionales. En marzo de 2024, el salario permitía comprar 583 sachets, mientras que un año después la cantidad alcanzada ascendió a 933 sachets.
Para el asado, el poder de compra creció un 20,2%, lo que habilitó la compra de 22,5 kilogramos más. De 111 kilos posibles en marzo de 2024, se pasó a 134 kilos en mayo de este año.
En cuanto al huevo, el salario permitió comprar un 24% más, lo que representa 70,5 medias docenas adicionales. En marzo de 2024, se podían adquirir 293 medias docenas, y en mayo de 2025, 364.
Finalmente, el pan mostró una mejora del 30% en términos de poder adquisitivo, con 94 kilogramos más disponibles. El salario pasó de alcanzar 319 kilos en marzo de 2024 a 413 kilos un año después.

El impacto en los productores

Mientras que del lado de los consumidores la combinación de la recuperación del salario real y el rezago en el precio de los alimentos ha permitido mejorar el deteriorado poder de compra, para los productores de algunos alimentos este atraso relativo en los precios representa una dificultad.
El impacto se observa con mayor intensidad en productos como la yerba mate, donde los costos han aumentado por encima de los precios, afectando la rentabilidad de los productores. Esta situación se replica en varias economías regionales que abastecen el mercado interno. Por poner algunos ejemplos: en el último año la cebolla ha perdido el 71,4% de su valor real, el tomate el 56,2% de su valor real, el arroz el 41,2%, la papa el 30,2%, la yerba el 25,8% y el vino el 21,5%.

No obstante, los datos del informe Del Sueldo al Plato sugieren un posible cambio de tendencia. La mejora del poder adquisitivo de los salarios, más temprano que tarde, se está traduciendo en un incremento de la demanda y el consumo de alimentos, beneficiando a las economías regionales.

Dato inflación

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) informó que la inflación de julio de 2025 fue del 1,9%, por encima del 1,6% registrado en junio, pero fue leído como muy positivo por el bajo traslado a precios de la devaluación.

Las principales subas del mes se concentraron en los rubros Recreación y cultura (+4,8%), Transporte (+2,8%), Restaurantes y hoteles (+2,8%). En tanto, el rubro Alimentos y bebidas no alcohólicas, el de mayor peso en la canasta, mostró un incremento de 1,9%.

Con este dato, la inflación acumulada en el primer semestre de 2025 alcanzó el 17,3%, mientras que la variación interanual se ubicó en 36,6%, completando así dieciséis meses consecutivos de desaceleración. Alimentos nuevamente estuvo por debajo del IPC general en la comparación interanual, con una suba de 30,6%, lo que tiene un efecto directo en la medición de la pobreza, por la alta ponderación de la canasta alimentaria.

¿Qué es el RIPTE?

La Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) es un indicador salarial de naturaleza previsional elaborado por la Subsecretaria de Seguridad Social del Ministerio de Desarrollo Humano.

Este indicador precisa la remuneración promedio sujeta a aportes al Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) que perciben los trabajadores que se encuentran bajo relación de dependencia y que han sido declarados en forma continua durante los últimos 13 meses, tanto en el sector público como en el privado

Su publicación se realiza hasta 45 días de finalizado el periodo correspondiente debido al tiempo que transcurre entre la recepción y el procesamiento de las Declaraciones Juradas que los empleadores presentan ante la AFIP.

Entre las definiciones metodológicas más importantes de RIPTE se encuentran las siguientes:

  • Los salarios evaluados son los correspondientes a los puestos de trabajo con una antigüedad de 13 meses o más.
  • Considera los salarios de los puestos de trabajo del sector privado y del sector público nacional, provincial y municipal que hayan transferido sus cajas previsionales SIPA.
  • Solo cuantifica los componentes remunerativos del salario (imponibles al sistema de seguridad social).
  • Tiene en cuenta el monto salarial hasta el tope imponible definido para los aportes personales al sistema de seguridad social.

¿Qué precios de alimentos se consideran?

En el cálculo se consideran los precios unitarios relevados por el INDEC en el IPC.

CASE, marca de CNH, recibió en su planta de Contagem, en Minas Gerais, a los principales distribuidores de América Latina para un entrenamiento comercial que combinó teoría, práctica y un enriquecedor intercambio de experiencias. El encuentro tuvo como objetivo fortalecer el vínculo con quienes representan la marca en cada país, comprender sus desafíos cotidianos y acompañarlos en el desarrollo de sus mercados.

La apertura del encuentro estuvo a cargo de Henrique Sá, líder para América Latina; Mario Rizzi, gerente comercial para América Latina; y Débora Fonseca Viana, responsable de entrenamientos, quien resumió el espíritu de la reunión: “Más que capacitar, queremos escuchar, compartir experiencias y reforzar nuestros vínculos”.

Mario Rizzi destacó que “estamos en una nueva etapa de relación en América Latina, impulsada por los cambios que trajo la tecnología en los últimos años. Tener este contacto más cercano con nuestros distribuidores y sus equipos, y por supuesto con los clientes, es fundamental. Cualquier instancia que fortalezca esta conexión es clave para nosotros”.

Lina González, responsable del distribuidor colombiano Partequipos, elogió la iniciativa: “Es una oportunidad de crecimiento profesional y personal. Estoy motivada para llevar este conocimiento a nuestro equipo y así incrementar nuestras ventas, algo positivo tanto para CASE como para nosotros”.

Un recorrido de innovación

Durante la jornada, los visitantes recorrieron la fábrica de CNH en Contagem, donde pudieron ver en funcionamiento diferentes procesos productivos, visitar el Control Room, el centro de inteligencia y monitoreo de máquinas, y conocer las recientes inversiones en tecnología, como el nuevo equipo para la fabricación de chasis de cargadoras frontales. Según Raquel Gonçalves, líder de manufactura, “esta máquina aumentará la productividad y reducirá costos de mantenimiento, siempre con foco en la calidad”.

Además, visitaron el recientemente inaugurado Centro de Experiencia al Cliente, en Sarzedo, donde tuvieron la oportunidad de operar los equipos y comprobar de primera mano su potencia y rendimiento; un momento único para experimentar, en el terreno, toda la fuerza CASE.

Gabriela Brito, gerente de Marketing y Comunicación de CASE, remarcó la importancia de la sinergia entre la marca y los distribuidores: “Reunirlos en la planta de Contagem y en el nuevo Centro de Experiencia al Cliente nos permite compartir las soluciones más avanzadas del sector y prepararnos para lograr resultados aún mayores en cada mercado”.