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Con motivo de la Semana Mundial del Huevo, que se celebra del 7 al 11 de octubre, la Cámara Argentina de Productores Avícolas (CAPIA) resaltó el crecimiento sostenido de la industria del huevo en Argentina, un producto que combina atributos de sostenibilidad, nutrición y accesibilidad económica. Ante un contexto económico desafiante, la cámara subraya la importancia de este alimento en la dieta de los argentinos y remarca la necesidad de eliminar el IVA para fortalecer el consumo interno.

El Día Mundial del Huevo se estableció en Viena en 1996, cuando se decidió festejar el poder del huevo el segundo viernes de octubre de cada año. En Argentina desde 2006 se festeja la semana mundial del huevo haciendo coincidir el cierre de los festejos en segundo viernes de octubre cuando se celebra el Día Mundial del Huevo. A lo largo de los años, el Día Mundial del Huevo ha sido testigo de una gran variedad de celebraciones, que incluyen festivales del huevo, congresos científicos, concursos de recetas, kermeses, donaciones de huevos, ceremonias de premios, entre muchas otras. Este año, Argentina lo celebra con una maratón de recetas con 14 chefs y médicos cocinando en vivo por el canal de YouTube del Instituto Latinoamericano del Huevo.

Que es el huevo: es uno de los alimentos más antiguos y alimentan a la humanidad mucho antes, es probable que las gallinas ponedoras domesticadas se remontan al año 7500 a. C. Desde el año 1996 los amantes de los huevos de todo el mundo han ideado nuevas formas creativas de homenajear a este súper alimento que es fuente insuperable de nutrientes valiosos para la nutrición y salud.

 Beneficios del consumo de huevo: La biodisponibilidad y densidad nutricional que aportan los huevos tienen la capacidad de mejorar directamente los resultados de la nutrición humana. Como alimento de origen animal ampliamente consumido, el huevo es elogiado por sus importantes beneficios nutricionales, particularmente en términos de desarrollo y crecimiento humanos es fundamental en los bebés, los jóvenes y las mujeres embarazadas, como también en entornos de bajos recursos. Los huevos contienen la proteína de la más alta calidad y 13 vitaminas y minerales que necesita el organismo para proteger y promover la salud. Las proteínas del huevo contiene los 9 aminoácidos esenciales para el organismo y la mejor puntuación de aprovechamiento. La calidad de las proteínas supera el 100% para los huevos, en comparación con el arroz al 37% y el trigo al 45%. Las proteínas son fundamentales para la salud, ya que además de formar la masa muscular del cuerpo, forman parte de la sangre, las hormonas y anticuerpos. Dos huevos de tamaño medio proporcionan proteína suficiente para cubrir más de un 30% de las ingestas recomendadas (IR) de proteínas de un adulto.

El huevo, un producto sustentable y nutritivo: se consolidó como una de las proteínas animales más sostenibles a nivel global. Según un estudio encargado por CAPIA al Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), la producción de huevos en Argentina tiene una de las menores huellas de carbono y de agua en comparación con otras fuentes de proteínas animales. Este resultado se logró gracias a la incorporación de tecnología de vanguardia en el 80% de las granjas avícolas del país, un esfuerzo que posiciona al sector como un referente en prácticas ambientales responsables.

Eliminación del IVA, un paso necesario: a pesar del crecimiento en la producción, el sector enfrenta distorsiones impositivas que afectan su competitividad. CAPIA insiste en la eliminación del IVA para el huevo, que actualmente está gravado con un 21%, mientras que otras proteínas animales tributan solo el 10,5%. “Eliminar el IVA no solo aliviaría al consumidor, sino que también permitiría al sector avícola seguir creciendo y ofreciendo un producto saludable y accesible a todos los argentinos”, afirmó Javier Prida, presidente ejecutivo de CAPIA.

Producción y consumo interno en auge: la producción de huevos en Argentina creció un 2,88% en 2023, alcanzando las 15.807.600.000 unidades. El consumo per cápita también mostró un incremento, situándose en 336 huevos al año. “Es un reconocimiento al trabajo incesante del sector para impulsar el consumo de un alimento esencial para la dieta de los argentinos, que a hoy superan los 352 unidades de consumo por habitante”, destacó Prida.

Una industria con impacto federal: el sector avícola tiene un fuerte impacto en la economía argentina, generando empleo directo e indirecto para más de 32.000 personas y con presencia en 18 provincias, principalmente en Buenos Aires, Entre Ríos, Córdoba y Mendoza. Este carácter federal de la industria es clave para el desarrollo económico de las economías regionales y el arraigo de las comunidades rurales, llevando desarrollo y trabajo de calidad a las localidades donde se instalan las producciones. Respecto de los aspectos sanitarios, desde CAPIA, destacaron, muy especialmente el rol del SENASA y sus equipos técnicos, quienes llevan a cabo una tarea estratégica con dedicación y profesionalismo.

Desafíos futuros, más tecnología y exportaciones: CAPIA se enfoca en seguir aumentando la tecnificación del sector, completando el 20% de las granjas que aún no han incorporado tecnologías avanzadas. Asimismo, la cámara buscará desarrollar un sistema de prefinanciación de exportaciones que permita recuperar los niveles de exportación previos a 2023, en un contexto de mercado interno con casi el 98% de la producción destinada al consumo nacional.

El huevo argentino es un producto no solo saludable y nutritivo, sino que su producción se lleva a cabo con altos estándares ambientales y sostenibles, así se desprende del estudio que la Cámara de Productores Avícolas (CAPIA), solicitó al Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) la realización de un Análisis de Ciclo de Vida (ACV) para conocer el desempeño ambiental del huevo fresco en función de dos indicadores: huella de carbono y huella de agua por escasez. Participaron del estudio 10 empresas, 5 de las cuales ya terminaron la certificación, con una producción en su conjunto de 1.300 millones de huevos por año.  

Los resultados indican que la huella de carbono es de 0,92 kg de CO2 eq/kg de huevo a granel, 1,04 kg de CO2 eq/kg de huevo en maple y 1,29 kg de CO2 eq/kg de huevo en estuche. Este impactó tiene muestra una excelente performance a nivel internacional (gráfico 1), el cual se distribuye en las etapas de postura (25,1 %), recría (13,9 %), plantas de alimentos balanceados/piensos (60,3 %), Clasificado (0,8 %).

Es un estudio del tipo “de la cuna a la puerta” e incluye las siguientes etapas de producción: granja de recría de pollas, granja de postura y clasificación. En algunos casos se incluyó el estudio del molino de piensos, donde se producen los alimentos para todas las etapas de crecimiento de los animales y los transportes que conectan las mencionadas etapas. El inventario ambiental incluyó datos de producción agrícola de granos e insumos que componen los piensos y los recursos energéticos y materiales utilizados en todas las etapas del ciclo productivo y de faena (energía eléctrica, combustibles, envases, productos de limpieza y desinfección, entre otros). Los inventarios se construyeron con datos agrícolas de la campaña 2021/2022.

Respecto a la huella de agua por escasez, el resultado fue de 0,39 m3 eq de agua/kg de huevo a granel, 0,43 m3 eq de agua/kg de huevo en maple, 0,47 m3 eq de agua/kg de huevo en maple. El desempeño ambiental se distribuye en las etapas de postura (19,2 %), recría (21,6 %), plantas de alimentos balanceados/piensos (57,5 %) y clasificación (1,7%). El mayor contribuyente de los impactos en las granjas de postura son los piensos, seguido por los aportes ocasionados por la energía y los transportes. Estos resultados posicionan al huevo como la proteína animal con menor huella hídrica (gráfico 2)

El estudio se realizó conforme a las normas ISO 14040 e ISO 14044 de ACV y las específicas para huella de carbono (ISO 14067) y huella de agua (ISO 14046), como así también con la norma de Ecoetiquetado tipo III ISO 14025 y con la Reglas de Categoría de Producto publicada por “The International EPD System AB”.

El Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) firmaron hoy un convenio para llevar adelante el proyecto “Determinación de impactos ambientales de la carne bovina conforme al sistema de Declaración Ambiental de Producto” .

El convenio fue rubricado este 14 de marzo en la sede del IPCVA por Juan José Grigera Naón, presidente del Instituto, Ruben Geneyro, presidente del INTI, y Nacira Muñoz, vicepresidenta del INTA en representación de Mariano Garmendia, su presidente.
Existe un creciente interés de los consumidores a nivel mundial sobre el desempeño ambiental de los productos, en particular para el caso de los alimentos. La propuesta técnica a desarrollar contempla la modelización y análisis tanto del sistema productivo primario, como del industrial y de consumo, incluyendo también a la logística y el transporte, entendiendo al análisis de ciclo de vida desde la cuna hasta la tumba (from cradle to grave) para la carne bovina sin hueso, refrigerada y envasada al vacío.

En el proyecto participan 28 establecimientos industriales y 84 de producción primaria representativos de todas las regiones productivas de nuestro país. El conocimiento de los impactos ambientales permitirá a los diferentes actores de la cadena de valor diseñar y ejecutar acciones orientadas a su reducción y asimismo certificar a futuro sus declaraciones ambientales con el INTI, en su rol de hub regional del sistema EPD International.

El estudio tendrá una duración de 18 meses y será coordinado técnicamente por el Dr. Javier Echazarreta por parte del INTI, y por el Dr. Rodolfo Bongiovanni por parte del INTA. El Jefe del Departamento de Promoción Interna del IPCVA, Ing. Adrián Bifaretti, será el responsable técnico del convenio por parte del IPCVA. Es importante destacar que esta iniciativa constituye una experiencia de interacción público-privada que registra pocos antecedentes a nivel internacional. Si bien existen algunas iniciativas privadas que demuestran la aplicación de esta metodología en empresas de distintos países, el estudio resulta inédito a nivel de cadena de valor sectorial.

Ruben Geneyro, presidente del INTI, subrayó que “la sustentabilidad y la contabilidad ambiental tienen una importancia creciente: los consumidores demandan productos más sustentables e información rigurosa, las empresas exigen a sus proveedores información ambiental sobre la cadena de suministro y los gobiernos utilizan la contabilidad ambiental para proteger sus mercados. En este contexto, desde el INTI consideramos que el Análisis del Ciclo de Vida y las Declaraciones Ambientales de Producto son herramientas de gran valor para aumentar la competitividad de nuestra industria mediante la mejora de su desempeño ambiental y una comunicación objetiva, científica y confiable”.

Por su parte, Grigera Naón aseguró que “de este estudio van a surgir las pruebas indiscutibles de la sostenibilidad de la producción de carne vacuna argentina, un aspecto fundamental en la discusiones que se dan en los distintos foros internacionales”. “Y ello conllevará a una más sólida inserción de nuestro país en los mercados internacionales de carnes”, concluyó.

En tanto, Muñoz destacó el aporte técnico y científico del INTA para desarrollar e implementar mejoras en toda la cadena. “Es sumamente importante conocer el estado actual de situación en términos de trazabilidad y del impacto ambiental”, explicó.

Además, agregó que “esta información de diagnóstico permitirá corregir, de ser necesario, las perspectivas” y subrayó que “la corrección y el abordaje siempre es parte de una propuesta de desarrollo e implementación”.

Este proyecto a desarrollar por el IPCVA conjuntamente con el INTI y el INTA tiene una importancia estratégica para nuestro país, dado que la posibilidad de contar con información sobre el desempeño ambiental es clave para la construcción de nuevos pilares de competitividad que fortalezcan el prestigio de la carne vacuna argentina en los principales mercados del exterior y asimismo para facilitar la adopción de métodos de producción sustentables que satisfagan las crecientes preocupaciones ambientales de los consumidores.